
Hoy en día, cada vez más personas buscan mejorar su alimentación y optan por productos que parecen saludables. Sin embargo, muchas opciones en el mercado están disfrazadas de “saludables” cuando en realidad contienen altos niveles de azúcar, sal o ingredientes poco beneficiosos para el cuerpo. En este artículo, te contamos cuáles son esos alimentos engañosos y cómo tomar mejores decisiones.
Yogur bajo en grasa
El yogur suele asociarse con una alimentación saludable, pero muchas versiones “bajas en grasa” contienen grandes cantidades de azúcares añadidos para compensar la pérdida de sabor. En lugar de elegir estos productos, opta por yogur natural sin azúcar o yogurt griego natural y agrégale fruta fresca para endulzarlo de manera natural.
Jugos envasados
Los jugos, incluso los que dicen ser “100% naturales”, pueden contener azúcares añadidos y carecer de la fibra presente en la fruta entera. Esto provoca picos de glucosa en sangre y puede contribuir al aumento de peso. Es mejor optar por la fruta entera o picada así como preparar jugos verdes sin colar para preservar su fibra.
Granola y cereales “saludables”
La granola y algunos cereales se comercializan como opciones nutritivas, pero muchas marcas incluyen altas cantidades de azúcar, miel o jarabe de maíz. Es importante leer las etiquetas y elegir opciones con 0% azúcar y más fibra.
Barras de energía o “fitness”
Estas barras pueden parecer una buena opción para un snack rápido, pero algunas contienen ingredientes que no son los más nutritivos ni saludables. Es recomendable optar por aquellas que contengan grasas saludables, como cacahuates, nueces o almendras, cereales integrales como avena, amaranto o quinoa, y que no contengan azúcares añadidos ni miel de abeja.

Pan integral comercial
Muchos panes etiquetados como “integrales” en realidad contienen harinas refinadas, jarabe de maíz de alta fructosa y sólo una pequeña cantidad de fibra. Para asegurarte de que realmente estás eligiendo una opción saludable es importante revisar la información nutrimental e ingredientes y elegir aquellos en los que la harina de trigo integral sea su principal ingrediente. Además para asegurar que el pan ofrezca un buen aporte de fibra, verifica que tenga al menos 2.5 gramos de fibra por porción.
Aderezos para ensaladas
Las ensaladas pueden ser una comida muy saludable, pero los aderezos comerciales suelen estar cargados de azúcar, sodio o sal y grasas saturadas lo cual los hace poco saludables. En su lugar, opta por aderezos o vinagretas caseras donde incluyas grasas saludables como aceite de oliva, aceite de aguacate o aceite de uva, saborizantes naturales como jugo de limón o mostaza y especias naturales como pimienta, ajo, orégano, albahaca, romero, entre otros.
Productos sin gluten
Muchas personas creen que los productos “sin gluten” son más saludables, pero en realidad, algunos contienen harinas refinadas y azúcares añadidos para mejorar su textura y sabor. Si eres intolerante al gluten, es mejor optar por cereales de desayuno, panes y galletas a base de avena, maíz, arroz, quinoa o amaranto además de verificar que en su etiquetado cuente con el certificado de libre de gluten, especialmente si se tiene enfermedad celíaca. Recuerda también verificar que no contengan azúcares añadidos.
Ser consciente de lo que realmente estamos comiendo es clave para mantener una alimentación saludable. Leer las etiquetas, optar por opciones naturales y evitar productos ultra procesados puede hacer una gran diferencia en nuestra salud. Si quieres controlar tus niveles de azúcar en sangre de la mano de los especialistas, ¡No esperes más y agenda tu primera valoración sin costo hoy mismo en Clínicas del Azúcar!